El otro día vi una grabación de cómo un perro se atrevía a cruzar una autopista de tres carriles para rescatar a otro perro que había sido atropellado. Aunque el perro que yacía en el pavimento estaba moribundo, el primer can no dudó en arriesgar su propia vida hasta llegar al agonizante chucho (y digo chucho desde el cariño). Efectivamente, el perro ya estaba muerto, pero su rescatador lo arrastró hasta sacarlo de la carretera sorteando los vehículos.
Esta mañana mientras desayunaba mis cereales de disonaurios de chocolate me ha dado tiempo de ver dos noticias en la tele. La primera hablaba de una mujer que había sido maltratada (incluyendo apuñalamiento) por su marido. El marido está en la calle tan tranquilo mientras ella apenas sale de casa y si lo hace es un con spray de pimienta bajo la manga. La segunda noticia era la condena de cinco años a una madre que había maltratado a sus hijos de 2 y 4 años, ante la mirada impasible de cu cónyuge, condenado a dos años y medio por ser cómplice en el maltrato. Esto me lleva al caso de la niña Alba y a lo que escuché el otro día: una mujer había vendido a sus dos hijos para hacerse una liposucción.
Teniendo en cuenta la historia del perro y las demás noticias he llegado a la conclusión de que el ser humano tiene atrofiado su instinto de supervivencia y está destinado a extinguirse. Como dijo una vez Octavia Butler, si el ser humano es capaz de tragarse que con la carrera de armamento nuclear vamos a estar más seguros, es que hay algo malo en nosotros como especie. No es que haya individuos malos, no, es que hay algo en nuestra especie que no funciona bien.
¿Cuántos humanos harían lo que hizo el perro? Nosotros sacaríamos el móvil y llamaríamos a los servicios de emergencia, pero claro, no es lo mismo encontrarse un perro tendido en la carretera que un ser humano. El perro al rescate se dejaba llevar por el instinto de supervivencia de la especie, pero nosotros nos guiamos por el instinto de supervivencia del individuo, y así nos va. De vez en cuando deberíamos dejarnos llevar por el instinto animal en vez de por la inteligencia humana (sie es que esto no es un poco paradójico).
Parece que desde que estudio el ecofeminismo (y ya cansa escuchar eco..¿qué?) me he sensibilizado un poco más con ciertos temas y me he vuelto más escéptica con respecto al ser humano.
Esta mañana mientras desayunaba mis cereales de disonaurios de chocolate me ha dado tiempo de ver dos noticias en la tele. La primera hablaba de una mujer que había sido maltratada (incluyendo apuñalamiento) por su marido. El marido está en la calle tan tranquilo mientras ella apenas sale de casa y si lo hace es un con spray de pimienta bajo la manga. La segunda noticia era la condena de cinco años a una madre que había maltratado a sus hijos de 2 y 4 años, ante la mirada impasible de cu cónyuge, condenado a dos años y medio por ser cómplice en el maltrato. Esto me lleva al caso de la niña Alba y a lo que escuché el otro día: una mujer había vendido a sus dos hijos para hacerse una liposucción.
Teniendo en cuenta la historia del perro y las demás noticias he llegado a la conclusión de que el ser humano tiene atrofiado su instinto de supervivencia y está destinado a extinguirse. Como dijo una vez Octavia Butler, si el ser humano es capaz de tragarse que con la carrera de armamento nuclear vamos a estar más seguros, es que hay algo malo en nosotros como especie. No es que haya individuos malos, no, es que hay algo en nuestra especie que no funciona bien.
¿Cuántos humanos harían lo que hizo el perro? Nosotros sacaríamos el móvil y llamaríamos a los servicios de emergencia, pero claro, no es lo mismo encontrarse un perro tendido en la carretera que un ser humano. El perro al rescate se dejaba llevar por el instinto de supervivencia de la especie, pero nosotros nos guiamos por el instinto de supervivencia del individuo, y así nos va. De vez en cuando deberíamos dejarnos llevar por el instinto animal en vez de por la inteligencia humana (sie es que esto no es un poco paradójico).
Parece que desde que estudio el ecofeminismo (y ya cansa escuchar eco..¿qué?) me he sensibilizado un poco más con ciertos temas y me he vuelto más escéptica con respecto al ser humano.